Soledad y Ausencia |
Es llegar tarde a ninguna cita.
No es soledad por donde entras,
es por la ausencia,
por la que me escapan los latidos.
Es tardar en llegar tarde.
De la sombra aprendo a qué
se atiene uno
en el estar iluminado.
Es la penumbra
y añorar la sombra duele,
en la luz más absoluta y meridiana.
Es llegar tarde a la tardanza.
No hay. No fue.
No está. No volverá.
De la esperanza a la certeza.
Del silencio hueco, al eco muerto.
No es la soledad por donde entras,
es por la ausencia,
por donde en ti, estando, no me encuentro.
Dame certeza en soledad
y no incertidumbre en la ausencia.
(Álvaro Hernando)